Con el fin de verano y la llegada de temperaturas más bajas, los niños regresaron a la escuela y se están adaptando a la rutina escolar. Esto quiere decir que es hora de pasar más tiempo en ambientes cerrados, con menos luz solar y para muchas personas con más estrés proveniente de los estudios y clases. Todos esto trae más resfríos y enfermedades de las que tenemos durante las vacaciones de verano. Hay varias cosas que deben tomarse en cuenta para mantenerse saludable durante el atareado año escolar.
Dormir es quizas el tema más menospreciado relacionado con el bienestar, ya que dormir bien en la noche es indispensable para restaurar el cuerpo, además de garantizar que la mente esté atenta, que estabilice las emociones y el sistema nervioso. Dependiendo la edad de su hijo, se necesita de un sueño reparador de entre 8 a 12 horas todas las noches y para la mayoría de las familias esto significa tener en mente un buen manejo del tiempo. Para los adolescentes puede ser difícil infundir este importante aspecto y asegurarse de que vayan a dormir temprano. Antes que nada, mis recomendaciones incluyen: cenar a más tardar a las 7pm y que todo aparato electrónico esté apagado por lo menos una hora antes de irse a dormir.
El ambiente social ruidoso y el estrés asociado durante el año escolar también es un gran problema para los niños de todas las edades, tanto para el bienestar mental como el fisiológico. Un buen punto de partida es tener conversaciones diarias sin tapujos y sin prejuicios con los niños. Haga preguntas abiertas sobre cómo van las cosas con los maestros y compañeros de clases y escuche con atención. Tal vez encuentre que hay estreses y preocupaciones ocultas a las que podría ayudar a solucionar teniendo un poco de compasión e ingenio.
También es muy importante ver que tan bien se alimentan nuestros hijos con la ingesta de alimentos y agua, y conocer la salud general de su sistema digestivo. Si bien, este tema es vasto, se utilizan algunas reglas generales. Para hidratarse se necesita beber agua. Las bebidas saborizadas, los refrescos y las bebidas carbonatadas no cumplen con los requisitos cuando hablamos de una hidratación adecuada durante el día. Recuerdo que esto era un problema cuando mis hijos erán chicos y vale la pena ver cuánta agua toman en la escuela. Los puntos básicos de consumir proteína saludable durante el día, reducir el azúcar refinada y consumir suficiente fibra y nutrientes provenientes de las frutas y verduras es indispensable. Los aumentos de azucar en la sangre proviene de muchos carbohidratos procesados y de la falta de proteína y verduras en el cerebro y el sistema nervioso, esto hace que cada aspecto escolar y de estudios sean más complejos.
Mantener el sistema inmunológico saludable para disminuir los resfriados y las gripes es una prioridad para todos los padres y todos los temas discutidos hasta ahora son de interés para lograr ese objetivo. Si bien la suplementación de nutrientes para niños es única para cada una de sus necesidades, hay unos de los que soy un gran promotor. Un buen probiótico puede ser de gran apoyo tanto para el sistema digestivo como para el inmunológico. Sin suplementación, los niveles de vitamina D comienzan a bajar en esta temporada del año al vivir en Bend y muchos niños no obtienen suficientes ácidos grasos esenciales Omega-3 en su dieta, así que un suplemento de aceite de pescado de alta calidad es la solución. Le deseamos lo mejor a su familia para que tenga un año escolar saludable y fructífero.
—Joshua Phillips, ND es un médico naturista y director de Hawthorn Healing Arts Center en Bend, Oregon. Si tiene preguntas o comentarios puede comunicarse con él en [email protected].
